Después del WEI vino el viaje a París. No hubo grandes fiestas ni nada por el estilo, fue un viaje más puramente turístico. Yo no había estado nunca y Milio sólo una vez de pequeño, por tanto había que ver demasiadas cosas para sólo 3 días. Y es que la ciudad de la luz es mucha ciudad. ¡Qué putada que tenga que volverme a acabar la carrera a Valencia! Aquí (en Francia, digo) está mejor, los jóvenes tenemos más oportunidades dentro de una empresa, además del salario que cobras desde el primer año que seas ingeniero. Incluso sin haber acabado la carrera (que le pregunten a Ignasi). El caso es que después de ver "la Défense" e imaginarme cómo sería mi vida allí hay algo por dentro que se remueve, que te dice, algún dia cogerás ese metro y te bajarás en Grande arche de la Défense con el trajecito y la corbatita para ir a currar en un edificio de 25 plantas en un despacho con vistas a la ciudad. ¡Qué bonito es soñar!
Volviendo al viaje, llegamos el viernes a mediodía y no nos quedaba otra que apañárnoslas hasta que mi primo David, que trabaja en Peugeot, en Poissy, un pueblo cercano, saliera del curro a por nosotros. Al bajar del tren comimos, subimos a la Torre de Montparnasse, desde la que hay vistas muy buenas de toda París, incluyendo la Torre Eiffel. De verdad que vale la pena pagar los 9 mauros y subir sus... ¡59 pisos! donde te vas a encontrar exposiciones de fotos, vídeos, y juegos interactivos sobre la ciudad, sus monumentos y su cultura. Después cogimos el metro y aparecimos en la Place de la Concorde con el monolito del mismo nombre, al lado del Jardin des Tuileries, el Parlamento francés, la Iglesia de la Madeleine y todo al lado del Sena y sus preciosos puentes. Luego, un paseo por los Campos Elíseos, pasando por el edificio de Invalides (allí donde alojaban a todos los heridos en las guerras y donde se encuentra la tumba de Napoleón), por el Grand Palais, el Petit Palais y finalmente llegando al Arco del Triunfo en la place de l'Étolie. Allí quedamos con David, quien nos llevó en coche al "Sagrado corazón".
Después de visitar Le Sacré Coeur estuvimos cenando en una crêperie de Montmartre, desde donde se puede ver la iluminación de la Torre Eiffel. Volvimos a coger el coche y dimos una vuelta, pasando por la zona de Clichy, donde se encuentra el Moulin Rouge, para acabar aparcando cerquita del Sena y dando otro paseo por la zona de la Torre Eiffel. ¿Sabíais que fue construida para la exposición de 1889 y luego la querían desmontar? ¡Qué gruñas! El paseo no fue muy largo ya que la jornada había sido larga y demasiado pesada para mi renqueante tobillo y aún nos esperaban otras dos bastante intensas.
El sábado nos levantamos tarde y comimos en casa de David un platito de pasta. Al conectarnos a internet, vimos con alegría y asombro que habían salido las notas del examen de IDP que Milio y yo habíamos hecho a distancia y curiosamente teníamos los dos 6,5. ¡Qué grande, Salinas! La magia de la ENST Bretagne seguía viva. Aunque, diciendo la verdad, no es tan sorprendente que saques la misma nota que tu compañero cuando has hecho el examen SIN VIGILANCIA y con los apuntes e internet disponibles... Pero, quand même, habíamos aprobado una de las asignaturas más chungas de cuarto, ¡eso era digno de celebración!
Quedamos con Ignasi, Mariale y demás hispano-gabachos para ir a ver la catedral, Notre Dame de Paris, cuya construcción duró casi dos siglos, de 1163 a 1345. Algún parisino nos dijo que es el monumento más visitado de Francia anualmente por delante de la Torre Eiffel, al contrario de lo que podríamos pensar. Yo he llegado a la conclusión de que se debe a que el que es católico visita la catedral regularmente, y el que ha subido a la torre lo hace un par de veces, tres como mucho. Nos dijeron incluso que hay mogollón de parisinos que nunca han subido la torre y que piensan que está ahí sólo para que los turistas le hagan fotos. Puedo entenderlo, yo soy el primero que, si no fuera por las excurisones del cole, no conocería prácticamente ninguno de los monumentos valencianos.
Buscamos sitio para cenar barato y además poder beber, y el barrio latino cumple con los requisitos. Hay tantos bares y restaurantes que según vas caminando por la calle salen y te ofrecen menús, descuentos, ofertas para grupos, etc. Se pegan para que entres. Finalmente nos decidimos por un griego en el que nos daban el menú a 10 mauros con una copa gratis. Como diría mi primo, "se dejaba comer" jejeje. Después de cenar la mayoría se fue para casa ya que sólo hay metros hasta la 1 (puto horario) y el taxi sale carísimo. Nosotros tres fuimos a la Défense y a ver el Louvre de noche.
El último día visitamos Poissy, el pueblo de mi primo, y un mirador desde el que se puede ver la ciudad parisina desde lejos. Destacan el conjunto de rascacielos de la zona de negocios y de nuevo los 325 metros de la torre más famosa de Francia. Luego, un paseito por el Sena en el Bateau Mouche y por la noche a ver el Barça-Valencia en un bar donde se pueden ver los mejores partidos de la Liga española. Después, a dormir en el tren que a las 9.50 de la mañana había que estar en clase. Clase a la que, por supuesto, fue Piti.
jueves, 3 de mayo de 2007
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1 comentario:
Pozi, aixo intentem, pasar-ho bé. Ja he dit en huilarmem (si és que encara ho llig algú) que fins finals d'agost/setembre no vaig a tornar, però pa festes de Sueke estic ahi el primer ;)
m'ha fet ilu que posares el comentari, com encara tinc poquets...
pd: la cara és la mateixa, lo que hi ha de menos és el monyo! XD
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